El tan llevado y traído durante la semana duelo entre los lanzadores Óscar Bustillos y José Ángel Ríos no hizo quedar mal a nadie, aún y que la mejor parte fue para OB con un poema de trabajo de sólo un hit en 7 entradas en que se apoyó el equipo de JAPAC para vencer 2-0 a los Padres en el primer encuentro de la serie final de la Liga de Beisbol JAPAC clase Abierta, edición «Juan Francisco Mora Arellano».
Ante la mirada del gran Vinicio Castilla en el graderío central, Bustillos retiró en orden a los primeros 11 bateadores que encaró. Esa brillante racha acabó cuando en la cuarta entrada, ya con dos outs, Alan Osuna lo sacudió con sencillo al jardín de la derecha pero no pasó nada porque enseguida dominó a Arturo Sais.
En la siguiente entrada regaló una base por bolas igualmente sin detalles que enmendar y la sexta la resolvió en orden. En la séptima vivió su momento más algido, sin duda, pues posterior a un out ligó pasaportes a Sais y Alba, pero ni Jorge Armando Félix ni Raúl Landeros dieron el batazo oportuno.
Óscar subió a la loma en la octava en que fue reibido por sencillo de Jesse Velarde, y de hecho le hizo par de lanzamientos a Jhovany Rivera, pero su lenguaje corporal evidenciaba agotamiento (las altas temperatura y más de 100 lanzamientos son una feroz combinación), cosa que detectó su manager, y entonces tuvo que salir del encuentro. Llegó en su relevo Radamés Robledo, quien con algo de problemas de comando pero logró colgar ese cero, y también el noveno pero en orden.
La derrota fue para el zurdo José Ángel Ríos, quien admitió esas dos rayitas en sus 6 episodios. Recetó 7 ponches. Lo relevó José Ángel Uzeta en el resto del camino.
CARRERAS
La carrera de la quiniela cayó hasta la cuarta tanda en que Edgar Ahumada abrió con sencillo, Raú Gutiérrez lo movió a la intermedia con toque de sacrificio, y anotó con un batazo de Abel Rodríguez no tan bien conectado pero con puntería certera por el lado izquierdo que se convirtió en sencillo impulsor.
La otra en la sexta en los spikes de Javier Alcaraz, quien desde la segunda colchoneta timbró con línea maciza de Raúl Gutiérrez que rozó el guante del primera base Landeros y terminó en el bosque derecho.
